A partir de 1945, la industria del tratamiento de las aguas se orienta según la evolución de las normas mundializadas. Se trata de un sector que, desde entonces, se ha asimilado al de la industria agroalimentaria. De esta manera, responde a los imperativos de normalización generalista de la soldadura TIG orbital (Gas inerte de tungsteno) a través de la norma ISO 96 92 -3 en apartados muy puntuales.
No es de extrañar que, a lo largo de 2017, puedan tener lugar modificaciones ya que, también, las peculiaridades de este sector se asemejan a las del sector farmacéutico.
En cualquier caso, se impone el empleo según la norma del acero inoxidable tipo 304 y 316 para la soldadura orbital, así como el espesor del tubo en función de la presión a la que se somete. La DGCCRF (Dirección General de la Competencia, el Consumo y la Lucha contra el Fraude francesa) garantiza que el uso de materiales en contacto directo con productos alimentarios se basa en esta norma general.
La complejidad de estas normas exige repetibilidad a los soldadores
Los instaladores se esfuerzan por conseguir, ante todo, calidad en la soldadura, sencillez en la ejecución y productividad máxima considerando las dificultades de espacio en las instalaciones. Estas necesidades obligan a acudir a empresas expertas en estos ámbitos. Su variada experiencia garantizará una preparación que no dejará nada al azar. La repetibilidad de las soldaduras se aprecia con precisión milimétrica en un espacio donde pueden encontrarse entre 10 y 12 tubos dispuestos en un mínimo espacio en el que habrá que intervenir sin desmontar. Donde la soldadura orbital trabaja sin fallos, la intervención humana puede desmoronarse.
¿Cuál es la precisión de corte de tubos y en bisel de la soldadura orbital?
Las mediciones deben ser precisas al milímetro para evitar las rebabas al realizar un corte. El empalme de una pieza, en una línea de producción o un corte isométrico de 1500 mm deben integrarse en un subconjunto que puede estar ubicado en una esquina de un taller, contra la pared a 50 cm del techo y sin paso de puerta. Todo ello deberá soportar la presurización con aumento de temperatura. La precisión de la soldadura orbital permite conservar las características el material antes o después de la soldadura sin modificar de manera alguna a productividad. De igual manera que el estudio previo de los requisitos, la minuciosa fase preparatoria, aporta la garantía necesaria para una perfecta ejecución repetitiva. Por otra parte, el empleo de bisel es, a menudo, más apropiado para trabajar los tubos con espesor superior a 3 milímetros. En este caso, será cuestión de reducir el espesor para realizar la soldadura en el interior del tubo y así, a continuación, recargar con metal para acrecentar el espesor.
Corte compatible con la soldadura orbital
La precisión del corte de los tubos entre ellos se basa en una preparación que tiene en cuenta todas las dificultades:
- Relativas al sector específico (nuclear, químico, etc.);
- Vinculadas a los materiales empleados y su espesor;
- Impuestas por el diseño de la instalación existente;
- Rango de temperaturas que existe en los talleres;
- Imperativos de producción y sus ciclos.
Las técnicas de la soldadura orbital implican tipos de corte específicos para el ajuste de las soldaduras sin rebabas.
